A 127 kilómetros de la ciudad de Córdoba se encuentra la Estancia Niña Paula. Convertido en un hotel de montaña, con restaurante y salón de té, este refugio de descanso de 200 hectáreas de extensión cuenta con una rica historia y se caracteriza por la cordialidad de sus anfitriones.
Actividades y más
Para los que deseen realizar paseos o actividades al aire libre, se pueden hacer caminatas, jornadas de trekking, parapente y cabalgatas. Una buena idea es visitar la estancia ubicada en un vallecito a 1460 metros sobre el nivel del mar. Allí, se pueden observar las paredes de adobe y piedra, originales de 1860, rematadas por una pileta natural de agua templada.
Confort y sabores
Esta casona de estilo criollo con reminiscencias coloniales cuenta con seis habitaciones con baño privado (tres dobles y tres triples). Además, ofrece dos salas de estar, salón comedor-desayunador y 150 hectáreas de parque, jardín y huerta orgánica con vistas panorámicas a las sierras.
Entre los sabores imperdibles de su restaurante está el desayuno con mermeladas caseras de higos, naranjas o moras. ¿Otra opción? Un té con tartas y confituras.
